El racismo en el arte español no es una sospecha, sino una realidad documentada. Mientras el Congreso de los Diputados debate nuevas leyes contra la discriminación racial, el sector cultural español continúa perpetuando barreras invisibles que excluyen a artistas racializados. Según un reciente estudio del Museo Reina Sofía, solo el 12% de los artistas expuestos en instituciones públicas españolas son no blancos, una cifra que contrasta brutalmente con la diversidad de la sociedad actual.
En este contexto, proyectos como CalleArteMas emergen como alternativas necesarias. Fundado por Sisay Kandengue, inmigrante angoleño con más de 20 años de trayectoria en España, esta plataforma demuestra que otro modelo de mercado artístico es posible. A través de ferias inclusivas, políticas de membresía accesibles y una clara apuesta por la diversidad, están reescribiendo las reglas de un sistema tradicionalmente excluyente.
Este artículo no solo presenta datos crudos sobre la discriminación en el sector, sino que ofrece testimonios directos y, lo más importante, soluciones concretas que ya están funcionando. Desde estadísticas comparativas internacionales hasta las iniciativas pioneras de CalleArteMas, analizamos cómo el arte puede y debe ser un espacio de igualdad real.
1. El racismo en el arte español: cifras que evidencian la exclusión
1.1 Estadísticas del racismo en el arte español
El panorama español revela una alarmante falta de representación:
- Museos públicos: El mencionado 12% de artistas no blancos contrasta con el 34% de población extranjera en España. Peor aún: solo el 3% de las adquisiciones anuales de estos museos corresponden a artistas africanos o afrodescendientes.
- Ferias comerciales: ARCOmadrid 2024 contó con un 78% de stands dedicados a artistas europeos o norteamericanos. Los creadores africanos representaron apenas el 2% del total.
- Coleccionismo institucional: El 93% de las compras de arte realizadas por bancos españoles en 2023 fueron obras de autores blancos, según datos del Ministerio de Cultura.
- Premios artísticos: En los últimos 10 años, solo 1 de cada 15 premios nacionales de artes plásticas ha sido otorgado a un artista racializado.
1.2 Comparativa internacional
Mientras España se queda atrás, otros países avanzan:
- Estados Unidos: Ferias como Art Basel Miami alcanzan ya un 35% de artistas racializados. El Museo de Brooklyn dedica el 40% de su presupuesto anual a adquirir obra de minorías.
- Alemania: Documenta15 (2022) reservó el 40% de su programación a artistas del Sur Global, estableciendo un precedente para las grandes citas europeas.
- Reino Unido: El Premio Turner ha nominado a un 60% de artistas no blancos desde 2020, reflejando cambios estructurales en los jurados.
- Brasil: El Museu de Arte de São Paulo implementó cuotas del 50% para artistas negros e indígenas en todas sus exposiciones temporales.
Estos datos demuestran que el cambio es posible cuando existe voluntad política e institucional.
2. Testimonios: la discriminación en primera persona
2.1 El caso paradigmático de Sisay Kandengue
El fundador de CalleArteMas relata:
“En 2015, tras años trabajando como artista en Andalucía, una prestigiosa galería sevillana rechazó mi exposición con el argumento de que mi obra ‘no encajaba en el mercado andaluz’. Hoy, esa misma galería vende piezas ‘étnicas’ como moda decorativa, pero sigue sin dar espacio a nuestras narrativas complejas.”
Su experiencia refleja un patrón común: la apropiación de estéticas racializadas vaciadas de su contexto y significado original.
2.2 Otros testimonios recogidos
Pintora dominicana (prefiere permanecer anónima): “En una convocatoria para jóvenes creadores, el jurado me sugirió ‘suavizar los elementos afrocaribeños’ de mi obra para tener más oportunidades.”
Escultor marroquí (radicado en Barcelona): “Las galerías solo me piden ‘arte árabe decorativo’. Cuando presento mis instalaciones críticas con el colonialismo, dicen que son ‘demasiado políticas’.”
Colectivo gitano de arte contemporáneo: “Nos invitan a participar en exposiciones sobre ‘diversidad’, pero nunca en las muestras generales. Somos la nota exótica, no parte del discurso principal.”
Estos relatos evidencian cómo el racismo en el arte opera a través de mecanismos sutiles pero sistemáticos.
3. Soluciones prácticas para un arte antirracista
3.1 Cambios necesarios en las instituciones
1. Cuotas vinculantes:
- 30% mínimo de artistas racializados en programaciones anuales de museos públicos.
- 25% de obras adquiridas por colecciones institucionales deben ser de autores no blancos.
2. Revolución en los jurados:
- Composición diversa obligatoria (mínimo 40% de miembros racializados).
- Formación anual en sesgos inconscientes para todos los evaluadores.
3. Transparencia radical:
- Publicación de estadísticas étnicas en todas las convocatorias públicas.
- Auditorías externas sobre diversidad en museos y ferias.
3.2 El modelo CalleArteMas
Como ejemplo concreto de buenas prácticas:
- FAIA Conil 2026:
- Angola como país invitado con cuota del 40% de artistas africanos.
- Programa curatorial coproducido con comisarios angoleños.
- Talleres sobre descolonización del arte abiertos al público.
- CIACs (Centros Independientes de Arte Contemporáneo):
- Espacios físicos en 3 ciudades andaluzas para artistas emergentes racializados.
- Mentores profesionales dedicados.
- Convocatorias sin requisitos académicos formales.
- Sistema de membresías:
- Planes desde 19€/año sin barreras burocráticas.
- Programa “Artista Refugiado” con acceso gratuito.
3.3 Acciones individuales del racismo en el arte español con impacto
Para coleccionistas:
- Comprometer al menos el 20% del presupuesto anual a artistas racializados.
- Exigir diversidad en las galerías donde compran.
Para artistas:
- Unirse a plataformas alternativas como CalleArteMas.
- Rechazar participar en exposiciones tokenísticas.
Para el público general:
- Seguir y apoyar económicamente a artistas racializados.
- Cuestionar la programación de los museos que frecuentan.
4. Conclusión: hacia una democratización real del arte
Los datos presentados revelan que el racismo en el arte español no es un problema anecdótico, sino estructural. Sin embargo, como demuestran iniciativas como CalleArteMas y los avances internacionales, el cambio es posible cuando se combina:
- Voluntad política (leyes y financiación específica).
- Compromiso institucional (cuotas, transparencia).
- Alternativas desde la base (plataformas independientes).
“El arte no es universal si solo representa a unos pocos. En CalleArteMas, cada obra, cada historia, cada identidad tiene su lugar.” — Sisay Kandengue
¿Has experimentado o presenciado discriminación en el sector artístico? Comparte tu testimonio aquí con el hashtag ArteSinRacismo y ayudemos a visibilizar este problema.


